miércoles, 18 de noviembre de 2009

Absurdalia

(publicado en brandlife y periodico de la publicidad)
No, no se equivocan, hoy la columna de nuevo va de Naming. Pero por fin ha llegado el día en que me toca poner por escrito la primera regla del Naming en España, antes de aplicar cualquiera de las demás: “Que el nombre no termine en Alia”.

Recuerden que dar un nombre a una empresa o producto no es como dárselo a un hijo. No es un problema llamarse Juan o Pedro, como miles de personas, ya que hablamos de individuos, que se diferencian en el rostro, familia, educación apellidos, etc. Sólo en Huerta del Rey, provincia de Burgos se han planteado la diferenciación como criterio principal para nombrar personas, y han acabado en el Guiness por tener nombres como Ursicinia, Especioso, Evilasio, Marceonila, Merenciana, Ubiniano o Sicilio.

Pero para una marca, la diferenciación es importante. Seguimos peleando para convencer a los clientes de que no es imprescindible que el nombre describa la actividad de forma literal. Un ejemplo muy actual de nombre diferenciador es “BlackBerry”. No describe el aparato en cuestión pero una vez lleno de contenido es un caso de éxito.

Hace unos diez años comenzó “la fiebre del alia”. Terminar cualquier cosa en “alia” es un recurso fácil, para dar idea de algo grande. Del acero, Aceralia. Del agua Aqualia. O sea que si montamos una pequeña empresa de cafés: pues Cafetalia (ojo, existe). Y de ahí han salido: Navegalia, Realia, Envialia, Noctalia, Iluminalia, Nominalia, Habitalia, Localia, Hostalia, Saludalia, Musicalia. Yo las colecciono. Y tomé con el móvil una foto única, en el mismo portal de la calle Serrano se encuentran Coptalia y Ministeralia.

Derivados de la fiebre del alia ha habido efectos secundarios menores, como Invertia, Universia o Criteria, pero eso ya es hilar muy fino, y depende de los gustos.

Para terminar, muchos piensan en lanzar una empresa y tener un nombre bueno y registrable en una o dos semanas. Y muchas veces se quedan con el nombre “de guerra” del proyecto, que a veces es parecido al de las operaciones policiales, sólo porque se han acostumbrado a él.

El nombre es la parte más duradera de una marca. De verdad, merece la pena dedicarle tiempo, dinero y sentido común.

3 comentarios:

  1. Fantástico. Esto lleva a la gente a preguntarse por qué es importante invertir en creatividad. La gente tiende a menospreciar la importancia de tener una imagen y un nombre impactante, la gente cree que un servicio o producto es suficiente para seducir a un mercado cuando no lo es. Fenomenal

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  2. Gracias Paola. Intento evangelizar en la prensa donde se publican estas cosas, pero para mí es muy frustrante luchar en un mercado de intangibles. El buen el gobierno corporativo tiene su influencia en la marca, este mes hubo un buen seminario de Reputación en Barcelona, donde estuve. En el blog también hay alguna frivolidad, pero ¡todos tenemos una vida además de un trabajo! Muchísimas gracias por ser mi primera y única seguidora. Espero que haya más..

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  3. Bueno, Luis me hago tu segundo següidor, No tenia ni idea de que te habias incorporado al club de los piraos del blog. Un abrazo

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